CULPAR A LOS DEMAS DE NUESTRAS FALTAS.

 CULPAR A LOS  DEMAS  DE NUESTRAS FALTAS.

Cuando  Eva  fue  engañada  por  la  serpiente para que  comiera del fruto prohibido se lo  ofreció  entonces  a  Adán, quien  tenía  la  responsabilidad de  cuidar del huerto, y  también de la  mujer que  tenia, Adán debió de  haber  hablado sobre  dicho  fruto que no se podía  comer, de  seguro que si se lo advirtió y  cuando ella se lo ofreció a  él se  tristemente no se  detuvo a considerar las consecuencias siguió adelante  y lo comió.

   Nosotros  antes de actuar debemos de  tomar unos  segundos  para  saber  que  cualquier conducta que  o  decisión que  tome, traerá  sus consecuencia, sean buenas  o malas, para  Adán  fue una  decisión mala ya que  había  decidido actuar por su cuenta separado de  Dios  por  la desobediencia de  su  conducta.

   Cuando el Dios que  lo hizo le  pregunto porque se  escondía y que si había  comido del fruto del árbol prohibido,   le  hecho la  culpa a su mujer,” La  mujer que  me distes…”, así  somos  nosotros, no  confrontamos  nuestros  errores y los justificamos.